San Salvador / AP - La Corte Suprema de
Justicia confirmó el jueves la condena de 10 años de prisión impuesta al
expresidente Tony Saca y que devuelva al Estado 260,7 millones de dólares.
La
Sala de lo Penal de la Corte Suprema también ratificó las condenas impuestas a
tres de sus exfuncionarios más cercanos y tres exempleados de Casa
Presidencial, que además deberán de regresar el dinero robado.
En un hecho histórico, en septiembre de 2018,
un tribunal de justicia de El Salvador condenó al expresidente Saca a diez años
de prisión luego de ser procesado por desviar más de 300 millones de dólares de
las arcas del Estado para favorecer a sus empresas y a terceros.
Saca que se convirtió
en el primer exmandatario salvadoreño condenado por corrupción, también fue
condenado a responder civilmente por 260,7 millones de dólares de los más de
300 millones que el Ministerio Público asegura que la red de corrupción sacó de
los fondos públicos.
Los abogados del
expresidente presentaron amparos ante la Cámara Segundo de lo Penal, que en
julio suspendió el reintegro del dinero sustraído, favoreciendo también a los
tres exfuncionarios y tres exempleados de Casa Presidencial.
La Cámara
resolvió que Saca y los otros seis vinculados a la trama de corrupción no
debían de regresar el dinero por el momento, y ordenó que se siguiera un
proceso de recuperación del dinero a través de un juicio civil.
Pero ahora la Corte Suprema ratificó la
condena que el Tribunal de Sentencia impuso a Saca y los otros seis implicados
y además determinó que los imputados deberán de cancelar 347,117.17 dólares
adicionales que, por error, no había sido incluidos en la condena de cada uno
de ellos.
Según la resolución de la
Corte Suprema, Saca deberá de reintegrar 260,7 millones de dólares y cumplir
los 10 años de prisión; el exsecretario de Comunicaciones, Julio Rank, cinco
años en la cárcel y reintegrar 8,3 millones; el exsecretario privado Elmer
Charlaix, diez años de prisión y regresar 15 millones; mientras que el
exsecretario de Juventud, César Funes, cinco años de cárcel y regresar
886.697.697.
Francisco
Rodríguez Arteaga, jefe de la unidad financiera de la Casa Presidencial,
recibió una pena de tres años por el delito de peculado, y por lavado de dinero
y activos otros tres años, mientras que Jorge Alberto Herrera, tesorero de la
misma, fue condenado a tres años de prisión por peculado.
Pablo Gómez, contador del exsecretario
privado de la Presidencia, también fue acusado de lavado de dinero y peculado
pero no aceptó declararse culpable ni negoció con la fiscalía, por lo que
decidió someterse al juicio ordinario y recibió una condena de 16 años de
prisión. Rodríguez Arteaga deberá de regresar siete millones de dólares,
Herrera tres millones y Gómez cinco millones.
Saca de 54 años,
que gobernó el país de 2004 a 2009, fue detenido el 30 de octubre de 2016 y es
el tercer exmandatario salvadoreño en ser procesado judicialmente por
enriquecimiento ilícito o por desvío de recursos públicos durante su mandato.
Los otros son Francisco Flores (1999-2004),
quien murió de un derrame cerebral mientras estaba en arraigo familiar, y
Mauricio Funes (2009-2014), el cual huyó a Nicaragua y tras ganar los comicios
presidenciales Nayib Bukele, el régimen de Daniel le otorgó la nacionalidad
nicaragüense a Funes para evitar su extradición, antes le había otorgado asilo.
Bukele había dicho que durante sus primeros
100 días de mandato extraditaría a Funes para responder por los delitos que le
son imputados durante el ejercicio de su cargo. Funes esta acusado en su país
por malversar más de 351 millones de dólares.
Publicar un comentario